miércoles, 18 de noviembre de 2020

MUSEO DEL PRADO (1).- GOYA

 

El Museo Nacional del Prado, está considerado como una de las mejores pinacotecas del mundo. El edificio es obra del arquitecto Juan de Villanueva que lo diseñó a instancia del rey Carlos III, para albergar el Gabinete de Ciencias Naturales, allá por 1785. Este Gabinete debería formar parte de un gran complejo que incluía el Observatorio Astronómico y el Jardín Botánico.



MUSEO NACIONAL DEL PRADO .- MADRID


Aunque la idea original de construir un museo de artes en España surgió de Fernando VI, fue su homónimo Fernando VII, quien a su regreso a Madrid en 1814, tras la Guerra de la Independencia contra la invasión francesa, quien decidió continuar con el proyecto. Un proyecto que José Bonaparte había plasmado anteriormente por escrito: la creación de un Museo de Pinturas, (al que él llamó Museo Josefino) que se iba a ubicar en un primer momento en el Palacio de Buenavista y más tarde en el de Godoy. Finalmente, influenciado por su esposa María Isabel de Braganza, Fernando VII optó por el edificio de Villanueva. El museo se inauguró el 19 de noviembre de 1819, con 311 obras.

El núcleo de la colección del Museo lo constituyen las obras de la Colección Real, los fondos del monasterio de San Lorenzo de El Escorial y las depositadas en el Museo de la Trinidad como consecuencia de la Desamortización de Mendizábal de 1835, que se incorporaron a la colección del Prado en 1870. A todas ellas hay que añadir más de dos mil trescientas pinturas y gran cantidad de esculturas, estampas, dibujos y piezas de artes decorativas, en su mayoría donaciones y legados, pero también compras, que han ido incrementando los fondos del Museo.

Como consecuencia del crecimiento del patrimonio de la pinacoteca, se han sucedido a lo largo de su historia sucesivas ampliaciones en el edificio primitivo. Sin embargo, estas intervenciones resultaron insuficientes, por lo que se habilitado una nueva construcción junto a la fachada posterior, que se encuentra conectada con la sede tradicional desde el interior.

Estos son los marcapáginas que tengo del Museo, correspondientes al gran Francisco de Goya:

Mis preferidos, sin duda alguna son estos dos primeros.



Este separador se corresponde con la obra "El tres de mayo de 1808 en Madrid", también conocido como "Los fusilamientos del tres de mayo".

El pintor plasmó magistralmente los fusilamientos que llevaron a cabo las tropas invasoras de Napoleón, tras el levantamiento de los madrileños contra los franceses el día anterior, tratando de detener la salida del infante Francisco de Paula (hijo de Carlos IV) del Palacio Real con destino a Burdeos, como consecuencia de las abdicaciones de Bayona que otorgaron a José Bonaparte el trono de España.

Este cuadro, encargado por el Consejo de la Regencia tiene un compañero también muy conocido: "El dos de mayo de 1808 en Madrid" o "La carga de los mamelucos en la Puerta del Sol".

Se dice de "Los fusilamientos..." que es la primera obra de arte contemporáneo. El primer precedente de dos movimientos estilísticos: el romanticismo y el impresionismo. Muchos autores defienden también que Picasso se inspiraría claramente en este cuadro para pintar su famoso "Guernica".

El Museo editó posteriormente este otro separador correspondiente a este mismo lienzo:



Con motivo de la exposición temporal "Goya en tiempos de Guerra", el Museo editó este precioso marcapáginas de la obra hermana de la anterior, "El dos de mayo de 1808 en Madrid":





Otro de los marcapáginas de este artista que más me gustan es el correspondiente a la obra "El quitasol". Formaba parte de una serie de cartones para tapices para la Real Fábrica de Tapices de Santa Bárbara, destinados a decorar el comedor de los príncipes de Asturias en el Palacio de El Pardo.

Datado en 1777, la obra tiene un claro carácter costumbrista, muy al uso del pintor en esa etapa de su carrera. Representa "a una joven sentada en un ribazo, con un perrillo en el halda; a su lado un muchacho en pie haciéndole sombra con un quitasol..." según describió el propio Goya en el documento de entrega a la Real Fábrica.



Los entendidos dicen que se inspiró en el el cuadro "Vertumno y Pomona" del artista frances Jean Ranc, que fuera pintor de la corte con Felipe V. 






"La vendimia" o "El otoño", al igual que el anterior, es otro de la serie de cartones para tapiz que realizó Goya para adornar el comedor de los príncipes de Asturias. Lo pintó el de Fuendetodos en otoño de 1786. La escena nos descubre a un aristócrata que ofrece un racimo de uvas a una joven, mientras un niño trata de cogerlas. Tras ellos una vendimiadora soporta un cesto con uvas sobre la cabeza. El artista emplea en esta obra el esquema piramidal tan propio del Neoclasicismo,  que no tardará en abandonar. 




En la imagen destacan los tonos amarillos y ocres que, al igual que las uvas, simbolizan la estación otoñal. Goya realizó un total de cuatro cartones referidos a cada una de las estaciones. Por el formato, el que nos ocupa seguramente ocuparía uno de los muros laterales de la estancia, haciendo pareja con "La Primavera".

Los tapices no llegaron a colgarse en esa sala por el fallecimiento de Carlos III



El marcapáginas que muestro a continuación vuelve a recrear uno de los trece cartones que salieron de la mano de Goya para la decoración del comedor de los príncipes de Asturias con el tema de las cuatro estaciones y escenas campestres.  Se trata de "Riña de gatos" o "Gatos riñendo", como figura en el reverso del marcador.

Algunos autores sostienen que quizá la obra no sea de Goya porque la temática no guarda relación con el resto de los tapices de la serie. Un tema bastante inusual en el arte, por aquel entonces. Décadas después los creadores del Romanticismo adoptarían estas temáticas iniciadas por el pintor español.





El cartón escenifica la violencia de dos gatos enfrentados sobre un muro de ladrillo. 




De la obra "Perro semihundido" o "El perro" dispongo de dos puntos de libro. 

Es una de las llamadas Pinturas negras, que decoraron los muros de la Quinta del Sordo, la hacienda que fuera residencia del pintor. Estas catorce obras no reciben su nombre exclusivamente por el uso de colores más o menos oscuros, sino por tener temáticas sombrías y pesimistas. Según se explica en la web del Museo, se realizaron sobre la pared seca, no al fresco, aplicando óleo en la mezcla de los pigmentos. Todas ellas fueron trasladadas de revoco a lienzo a partir de 1873 por Salvador Martínez Cubells.






El siguiente marcapáginas se corresponde con una de las obras más famosas del maestro.




Se trata, claro esta del "La Maja Desnuda". Esta obra, pintada con anterioridad a 1800 y que junto con la también conocida "Maja Vestida" formaba parte de la colección de Godoy, ministro de Carlos IV.

La libertad con que Goya plasmó con total naturalidad la anatomía femenina tan poco frecuente en el arte español en aquellos tiempos, motivó que fuera investigado por el Tribunal de la Inquisición. Aunque fue absuelto, la obra fue "secuestrada" y retirada de la vista del público hasta inicios del siglo XX.

Goya en su defensa se refiere a las "majas", como Venus, pero lo cierto es que la audacia de la postura de la mujer, y el hecho de que parece estar mirando directamente "a los ojos" al artista, nos hace comprender que se trata de una mujer real, de carne y hueso.

Mucho se ha especulado sobre su identidad, algunos hablan de que se trataría de la mismísima Duquesa de Alba, otros apuntan a Pepita Tudó, que fue amante de Godoy desde 1797.

Algunos autores mantienen que para la realización del cuadro Goya podría haber tomado de ejemplo obras de tan alto calado como la Venus del Espejo de Velázquez, o la Venus de Urbino de Tiziano.





1 comentario:

  1. Preciosa lección de arte sobre el maestro Goya. Los marcapáginas, al igual que las obras que representan, espectaculares y bellísimos. Una colección maravillosa.
    Un abrazo

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